Una de las lesiones más comunes en la población en general es el esguince de tobillo mal curado. Cualquier torcedura al bajar unas escaleras, tropezarse con un bordillo o perder el equilibrio, pueden ser motivos suficientes para ocasionar un esguince de tobillo. Al ser una lesión tan frecuente entre jóvenes ,mayores y sobre todo deportistas, no le damos demasiada importancia. Pero la tiene. Si no lo curamos bien, la lesión podría influenciarnos en nuestra forma de caminar, movimientos, y acompañarnos el resto de nuestra vida. A veces una simple torcedura que no acaba de doler, la ignoramos y pensamos que se nos pasará. Efectivamente se pasará, pero porque cambiamos nuestra forma de pisar o mover el tobillo, no por haberse curado.
Índice
¿Qué es un esguince de tobillo?
Es cuando se produce una rotura de uno o varios de los ligamentos que estabilizan el tobillo. Cuando el tobillo se tuerce y genera una lesión se produce un daño en los ligamentos que lo envuelven. Los ligamentos dañados suelen ser los localizados en la parte lateral del tobillo. Existen diferentes grados en esta lesión que, podemos conocer según el aspecto del tobillo, hinchazón y tipo e intensidad de dolor.
Para evitar la formación de una lesión crónica es importante tratar correctamente cualquiera de los grados de lesión.
El esguince puede ser de grado uno, dos o tres.
- En un esguince de grado 1 se produce una distensión, un estiramiento excesivo del ligamento. Se produce un dolor leve con un poco de inflamación. Aplicar hielo las primeras 72 horas y realizar ejercicios de rehabilitación suele ser suficiente para asegurar la recuperación en una semana.
- El grado 2 implica una rotura parcial de los ligamentos del complejo lateral. El hematoma es perceptible y existe un dolor punzante en la zona alrededor del tobillo. Resulta complicado caminar o apoyar el pie. La inflamación es moderada.
- El grado 3 conlleva una rotura total de esos ligamentos. Se observa un claro hematoma e hinchazón en la zona, con dolor muy agudo.
Peligro de un esguince de tobillo mal curado
- Inestabilidad crónica de tobillo
- Miedo a practicar deporte con la misma intensidad
- Dolor residual
- Dolor en otras zonas del cuerpo, como la rodilla o la zona lumbar.
- Posibilidad de recaída
Prevenir un esguince de tobillo mal tratado
Para prevenir un esguince de tobillo os recomendamos seguir los siguientes consejos:
- Realizar un calentamientos y estiramientos adecuados, en el inicio y final de la actividad.
- Trabajo de fuerza; con el fortalecimiento evitaremos torceduras innecesarias.
- Trabajo excéntrico de tobillo. Son movimientos de frenado, en los cuales el trabajo que realizan los ligamentos es perfecto.
- Trabajar la propiocepción de tobillo; Pretende preparar, creando inestabilidad, las posibles caídas o malas pisadas que puedan ocurrir en el entrenamiento o competición y prevenirlas, estando perfectamente preparados.
- Trabajar los dos tobillos para evitar que un tobillo esté más fuerte que el otro.
- Los masajes en el tobillo son muy útiles para aliviar dolencias y prevenir lesiones.
Pautas para tratar un esguince de tobillo
Como hemos comentado, es importante curar el esguince para evitar, a la larga, problemas de un esguince de tobillo mal tratado. Si curamos mal un esguince de tobillo, nuestro cuerpo irá evitando el dolor o la recaída modificando su forma de movimiento y nuestro centro de gravedad para evitar hacernos daño. Estos cambio puede producir daños en otras articulaciones o partes del cuerpo, como la rodilla, zona lumbar etc. Los fisioterapeutas siempre tendrán en cuenta nuestras lesiones anteriores, ya que muchas derivan de esguinces mal curados. El tobillo es una articulación muy sensible a lesiones, ya que está menos protegida muscularmente.
- Evitar caminar y apoyar el pie
Es mejor no usar la articulación dañada hasta saber que tipo de lesión tenemos.
Aplicar en el momento de la lesión una bolsa de hielo ayudará a evitar una inflamación mayor.
- Mantener el pie elevado
Para aliviar la hinchazón es necesario mantener el pie por encima de nuestro tronco.
- Ir al médico
En el momento de sufrir la lesión se aconseja acudir al médico para que pueda realizar una valoración y tratamiento adecuado. Una vez, el médico haya descartado una lesión mayor como rotura de ligamentos, y sepamos que lo que tenemos es un esguince, lo recomendable es asistir al fisioterapeuta para curarlo cuanto antes y evitar atrofias musculares por el exceso de reposo.
Rehabilitación para el esguince de tobillo
Una vez visitado al médico para la evaluación general, el tratamiento para el dolor y la inflamación con medicamentos. Asistir al fisioterapeuta ayudará a minimizar los daños y a la recuperación temprana de la lesión. La rehabilitación con fisioterapia es particularmente beneficioso para las personas con problemas crónicas en la articulación del tobillo. Existen diferentes modalidades de fisioterapia adaptadas al tipo de lesión; Para un lesión aguda, la crioterapia (terapia de frío usando compresas de hielo), y la estimulación muscular eléctrica reducirán el dolor y la hinchazón. Para las personas con lesiones recuperadas y que son capaces de tolerar la terapia adicional se aconseja la fisioterapia intensiva. Ejercicios adaptados ayudaran a recuperar el movimiento original, la fuerza y la estabilidad de la articulación. El fisioterapeuta, si fuera conveniente, puede aconsejar un programa de ejercicio para realizar en casa y acelerar el proceso de rehabilitación.
Ejercicios para el esguince de tobillo
Los ejercicios que a continuación citamos puede ayudar a preservar el movimiento del tobillo, y estirar los ligamentos dañados.
Ejercicios de rango de movimiento
- Con una toalla estiramos. Este ejercicio de estiramiento puede ser iniciada poco después de un esguince de tobillo y se puede hacer tres o cuatro veces al día durante varios minutos. Este ejercicio se puede realizar en posición acostado o sentado en pose.
- Escribir el Alfabeto con los dedos del pie: Utilizando los dedos del pie iniciamos la puesta en marcha de ejercicios para mejorar el rango de movimiento.
Ejercicios de resistencia
Con los ejercicios de resistencia fortalecemos los músculos de la articulación del tobillo. Al aumentar la fuerza del tobillo mejoramos la vulnerabilidad de esta articulación. Los ejercicios de fisioterapia que pueden ayudar son: dedo del pie aumenta y, talón y dedo del pie a pie en la que sea de pie o caminar sobre los dedos del pie ayuda a fortalecer la articulación
El equilibrio y entrenamiento propioceptivo para esguince de tobillo
Para iniciar el equilibrio y la reconversión propioceptiva, el ejercicio tablero que se tambalea, así como las de rango de movimiento y fuerza puede ser eficaz.
Pliométricos y ejercicios específicos para deportes
Los ejercicios específicos de la actividad deportiva se realizaran una vez la lesión se haya recuperado. Se aconseja realizar ejercicios para la rehabilitación como los siguientes:
- Amplitud de movimiento.
- Estirar y Fortalecer.
- El equilibrio y la propiocepción.
- Pliométricos y Deporte de Ejercicios específicos.